Me atrevo a decir, que nunca he aprendido a caer de pie.
Será que las mañanas no son mi momento preferido
O que los domingos siempre se animan a desarmarme
O que los lunes sin tus besos son interminables
Me atrevo a decir, que ya me acostumbre
A estar perdido dentro de mi mismo
A no saber muy bien donde apuntar mis pies
A tener miedo de quererte por el dolor de perderte
Me atrevo a decir, que no se cuantos años me quedan
Ni cuantos años perdi
Por querer ser grande siendo niño
Por seguir siendo niño cuando debía ser grande
Me atrevo a decir, que nunca entenderé
Porque los hombres dejaron de buscar la felicidad
Porque yo me rendi, como ellos, a esta realidad
Porque si estoy al borde del llanto, no puedo sonreir
Me atrevo a decir… que te quiero mas de lo que me quiero
Que hay dias en que no me aguanto
Que no siempre recuerdo mis sueños
Que me muero si el lugar que ocupas, se hace vacio
Me atrevo a decir, que hice de la vida
Un conejillo de indias
Que meti la pata tantas veces
Por creer que se acababa a la mañana
Me atrevo a decir, que no tengo derecho
A pedir explicaciones, de porque mi vida es como es
A exigirme mas de lo que puedo ser
A vivir volando sin poner los pies sobre la tierra
Me atrevo a decir, que tengo la obligación
De pedir perdón a las personas que lastime en mi intento de crecer
De pelear por lo que creo, midiendo las consecuencias
De poner en mi vocabulario, la palabra empatia